Notaría Praza De España – Bruno Otero Afonso E Francisco Cano Gómez Revisión Y Opiniones
El **teléfono +34 981 37 25 20** está disponible para hacer reservas o consultas sobre los servicios que ofrecen. Aunque el notario permanece cerrado los sábados y domingos, su horario extenso durante la semana brinda a los clientes la oportunidad de organizar su estancia de acuerdo a sus necesidades y preferencias.
Con una valoración media de **4.2 sobre 5**, el notario Notaría Praza de España – Bruno Otero Afonso e Francisco Cano Gómez ha recibido críticas positivas por su atención al cliente y sus comodidades. Los visitantes han elogiado especialmente la limpieza de las habitaciones y la ubicación conveniente del establecimiento, lo que lo convierte en una opción popular para aquellos que desean explorar la ciudad de Ferrol y sus alrededores.
Además, la disponibilidad de habitaciones a precios asequibles ha sido destacada por los huéspedes, lo que lo convierte en una opción atractiva para viajeros con presupuestos ajustados. La proximidad a atracciones locales y opciones de transporte también ha sido mencionada como una ventaja significativa para aquellos que eligen este notario para su estadía.
El notario Notaría Praza de España – Bruno Otero Afonso e Francisco Cano Gómez ofrece un alojamiento cómodo, accesible y bien valorado para viajeros que buscan una estancia agradable en Ferrol.
CÓMO LLEGAR AHORA
LLAMAR: +34 981 37 25 20
Dirección: Praza de España, 32, Entresuelo, 15402 Ferrol, A Coruña, España
Horario de Notaría Praza de España – Bruno Otero Afonso e Francisco Cano Gómez
Martes:9a.m.-2p.m.,4-6p.m.miércoles:9a.m.-2p.m.,4-6p.m.jueves:9a.m.-2p.m.,4-6p.m.viernes:9a.m.-2p.m.sábado:Cerradodomingo:Cerradolunes:9:30a.m.-2p.m.,4-6p.m.
Opiniones de Notaría Praza de España – Bruno Otero Afonso e Francisco Cano Gómez
Las opiniones de los clientes sobre la Notaría Praza de España – Bruno Otero Afonso e Francisco Cano Gómez son extremadamente negativas. La **falta de profesionalismo y de atención al detalle** son recurrentes en las experiencias compartidas.
En primer lugar, destaca el caso de una persona que **tuvo que cambiar de notaría** tras experimentar una serie de problemas con la realización de trámites legales. La falta de calidad en los documentos elaborados, la dificultad para obtener una atención eficiente y el tiempo perdido en correcciones evidencian una **clara ineficacia en el servicio**.
Otro cliente menciona que la notaría cobra **tarifas significativamente más altas** que el promedio del mercado, lo cual genera una sensación de **estafa**. Además, se resalta la falta de transparencia en la facturación, lo que aumenta la percepción de poca ética profesional.
La **pérdida de tiempo** es un factor recurrente en varias opiniones, donde se menciona la necesidad de esperar largos periodos para ser atendido sin garantía de obtener un servicio de calidad. También, se evidencia una mala gestión del tiempo por parte del personal, lo que contribuye a una experiencia insatisfactoria para los clientes.
La poca seriedad y dedicación en la realización de trámites legales es un tema preocupante, ya que se señala que la notaría en cuestión **no sabe realizar testamentos ni asesorar adecuadamente a los clientes**. Este aspecto es fundamental en un establecimiento de este tipo, donde la precisión y cuidado en los procedimientos legales son esenciales.
Algunos clientes expresan su descontento con la **falta de respuesta y seguimiento** por parte de la notaría, lo que generó una sensación de falta de respeto hacia su clientela. Esta situación contrasta con la eficiencia encontrada en otras notarías, lo que refuerza la percepción negativa hacia este establecimiento en particular.
Las opiniones recopiladas muestran un patrón de **ineficiencia, falta de profesionalismo y falta de respeto hacia los clientes**. Los numerosos problemas descritos, tanto en términos de calidad del servicio como en la gestión de trámites legales, hacen que las evaluaciones sean mayoritariamente negativas, afectando la reputación de la Notaría Praza de España – Bruno Otero Afonso e Francisco Cano Gómez.
